De hecho, el primer beso con una chica marca el comienzo de la intimidad en una pareja; razón por la cual se convierte en un hito importante en el inicio de cualquier relación.
Besar a una mujer por primera vez es mágico pero también puede ser una fuente de estrés, en la medida en que se busca hacer que ese momento sea perfecto y sin errores.
Lo primero que debe aclararse es que no hay una serie de trucos o manuales para besar a una mujer paso a paso que hagan que cualquier mujer permita que la beses.
Para que esto ocurra tiene que haber una atracción mutua y eso se logra a través del contacto social en distintas situaciones, conociendo a la persona y dejándose conocer.
La atracción es algo que se construye de forma progresiva. Me encantaría decirte que es posible aplicar algún truco mágico que te permita aprender cómo besar a una mujer en tres segundos, pero la verdad es que cada pareja tiene su ritmo y esto depende de la personalidad de ambos.
Hay quienes se conocen, pasan unas horas juntos, son capaces de sentir la atracción y terminan besándose apasionadamente en un rincón.
Esto es típico en ambientes como clubes nocturnos y fiestas, donde el ambiente y el alcohol se prestan para este tipo de escenarios, donde las personas se sienten más desinhibidas y no temen dar rienda suelta a sus instintos, aunque esto también tiene que ver con la personalidad.
Sin lugar a dudas, alguien extrovertido y directo es más propenso a hacer este tipo de cosas que alguien más tímido y retraído.
En efecto, hay parejas que pueden pasar meses saliendo, frecuentándose, compartiendo amigos y espacios en común, con signos de atracción tan obvios que todos a su alrededor lo perciben, se mueren por estar juntos, se gustan y no son capaces de dar ese primer paso; pues ambos son tímidos e introvertidos.
Esto puede ser romántico y hasta divertido, pero si la situación se prolonga demasiado en el tiempo, puede ser desesperante. Saber cómo besar a una mujer puede ahorrarte este tiempo perdido.
Si bien es cierto que no hay una fórmula mágica para curar la timidez o para crear el momento perfecto, es posible conocer ciertos trucos para besar a una mujer que te permitirán prepararte para la experiencia, hacerla lo más placentera posible y buscar activamente el momento para que ese beso ocurra.
No se trata de presionar a la mujer u obligarla para besarte, sino de aprender a interpretar las señales, de enviar los mensajes adecuados y prepararte para ese momento, es aprender a reconocer cuándo besar a una mujer por primera vez.
Y es que muchas parejas tardan demasiado en dar ese primer paso por timidez o miedo al rechazo. Recuerda: en estas cosas lo más importante es el consentimiento mutuo, si no estas seguro de si ella quiere ser besada, pregúntalo directamente.
Estos consejos te ayudarán a organizar tu estrategia y evitar esos momentos incómodos, tomar la iniciativa y darle el mejor beso de su vida.
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Prepárate para ese primer beso
Aunque parezca algo obvio, no está de más recordarte la importancia de la preparación física para ese beso. Tu higiene oral debe ser óptima, tus dientes limpios y tu aliento fresco.
De hecho, si planean salir en una cita y comer algo, evita comida demasiado condimentada o con ajo y cebolla. Esos olores se pueden quedar en el aliento durante horas, aún después de haber cepillado los dientes.
Es mejor evitarlas por completo para evitar el mal rato y llevar contigo mentas o enjuague bucal para estar siempre en condiciones besables.
La frescura de tu aliento es fundamental. Puedes ser guapo, interesante y divertido pero si tienes mal aliento crónico, seguramente ella evitará besarte.
Es posible que sufras de mal aliento y que no te des cuenta, así que no está de mal preguntarle a alguien con quien tengas mucha confianza y te diga la verdad.
Esto puede estar relacionado con tu salud oral (un diente con caries, placa acumulada, entre otros) o digestiva, ya sea porque tengas un problema o por tu dieta. Una visita rápida al odontólogo o al médico podría solucionar este inconveniente, ayudarte a mejorar tu salud y conquistar mujeres.
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Visualiza ese primer beso
No menosprecies el poder de la visualización. Intenta recrear en tu mente ese momento en que la tengas entre tus brazos y sus labios por fin se junten.
Imagina lo romántico y mágico del momento, intenta percibir su olor, siente la suavidad de su piel, su cabello, la tibieza de su tacto, incorpora todos los elementos sensoriales posibles a tu visión.
Aunque te parezca extraño, este ejercicio de visualización te ayudará en dos aspectos fundamentales.
En primer lugar te ayudará a manejar tu ansiedad y nervios anticipatorios, en la medida en que te desensibilizará un poco ante la situación, tu cerebro naturalizará un poco el estímulo y podrás estar preparado para cuando venga el momento, podríamos decir que estás entrenando a tu cerebro a actuar naturalmente de determinada forma ante esa situación, no te tomará por sorpresa.
Por otra parte, visualizarte besando a esa mujer que te gusta exitosamente creará una predisposición al triunfo, pues te llenará de confianza y aumentará tu seguridad personal.
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Aprende a leer las señales
Antes de lanzarte a sus labios deberías aprender a interpretar las señales tácitas que ella puede estar ofreciendo. ¿está coqueteando contigo? ¿hay algún tipo decontacto físico entre ustedes? ¿se queda mirando a tus labios? ¿Hay silencios tensos, en los que se quedan mirando fijamente hasta que uno de los dos se retira tímidamente?
Si respondes afirmativamente a dos o más de estas preguntas, es probable que ella también quiere besarte.
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Utiliza el lenguaje corporal
Otra forma de cerciorarte que ella está dispuesta a besarte es utilizar tu lenguaje corporal para insinuar tus intenciones. Cuando converses con ella, inclínate hacia ella, no exageres, es sólo girar tu cuerpo en su dirección e inclinarte un poco hacia ella, mostrando interés.
Si ella se aparta, crea distancia entre ustedes, puede que no esté preparada para besarte.
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Contacto físico
Rompe la barrera del contacto físico antes de ir por un beso. Puede ser un contacto casual, toca su brazo cuando estén hablando, apoya tu brazo sobre sus hombros como si la abrazaras mientras caminan, acomoda un mechón de su cabello detrás de la oreja con suavidad, toma su mano cuando vayan a cruzar la calle o sostenla para pasar algún escalón. Tiene que ser casual, amistoso y fluido.
Evita salir de la nada y poner tu mano sobre su rodilla, ya que eso se verá extraño e incómodo.
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Besos amistosos
Esto puede estar condicionado por la cultura, pero los latinos y los españoles, además de otros europeos, suelen despedirse de sus amigos con besos en la mejilla. Esto es genial, porque rompe esa barrera del contacto físico y hace que ese movimiento de acercar tu rostro al de ella sea más natural.
Si puedes, convierte esto en una costumbre entre ustedes, dale besos en la mejilla cuando la veas, toma su mano, bésala espontáneamente en la mejilla; por ejemplo, si te hace un favor pequeño, dile “eres increíblemente hermosa, gracias” y dale un besito. Juguetea, el objetivo es acostumbrarse a ese contacto antes de saltar a sus labios.
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Deja que tus ojos hablen
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Las miradas son el lenguaje previo de los besos. En esos momentos llenos de tensión sexual, en los que se miran fijamente a los ojos, permite que tu mirada vaya a sus labios, detente allí unos segundos y vuelve a verla a los ojos.
Sonríe, coquetea descaradamente con tu mirada. Observa cómo responde ella y si te sigue el juego. Aprende a coquetear con tu mirada y tus sonrisas, es mucho lo que puedes comunicar de ese modo.
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Busca el lugar y el momento apropiado
Necesitas saber dónde y cómo besar a una mujer. Antes de lanzarte a besarla, evalúa si están en el lugar y momento apropiado. No lo hagas en un lugar demasiado concurrido o si hay demasiadas personas conocidas alrededor.
Para ese primer beso prefiere un lugar íntimo, donde puedan tener un poco de privacidad y ninguno de los dos se sienta intimidado. Si hay muchas personas alrededor, sobre todo si hay alguien conocido, ella puede sentirse observada y rechazarte, aún más si es un poco tímida.
Cada situación es diferente, por ejemplo, si están bailando en una fiesta, rodeados de personas y se miran a los ojos, ese puede ser el momento ideal.
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Evita ir demasiado rápido
No te lances a besarla en la primera cita o apenas la veas, a menos que hayan mensajes obvios de su parte para que lo hagas. Construye el momento, permite que se sienta cómoda, pueden hacer algo divertido, que la ponga de buen humor y que el beso sea una forma romántica de cerrar una hermosa salida. Tomar las cosas con calma te hará mucho más atractivo.
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Ese primer beso debe ser corto
Digamos que ya has cumplido con cada uno de los pasos y por fin has logrado besarla. Como es su primer beso, te recomendamos que sea corto y dulce, para unos segundos, mírala y si ella lo permite, pueden seguir besándose.
Este primer contacto de sus labios debería ser breve, sencillo y dulce porque de ese modo ambos superan esa barrera, que produce tanta ansiedad, es lo suficientemente rápido para evitar cualquier error producido por los nervios y te permite sondear el terreno, antes de poder pasar a besos más intensos.
Es su primer beso juntos, ir de una vez a una instancia apasionada puede ser incómodo e incluso puede hacerla sentir que la estás presionando para llevarla a la cama, aunque esa no sea tu intención. Contrólate, ya habrá tiempo para ponerse intensos.
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Cuida la lengua
Saber cómo dar besos franceses quiere decir que sabes que la lengua debería ser una invitada ocasional a la fiesta de los besos, no una protagonista; sobre todo en estos primeros besos que suelen tener un carácter más exploratorio que cualquier cosa.
Dar beso francés a una mujer debe ser una actividad delicada, a la que se llega a medida que sube la pasión e intensidad de los besos. Acaricia su lengua con la tuya con suavidad, no metas tu lengua a su garganta, eso no es sexy. Evita lamer su cara o su cuello, al menos que ya estén en los preliminares de un contacto un poco más sexual.
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Utiliza las manos
Tus manos son parte activa del beso, pues besar a alguien que tiene los brazos colgando a los lados es como besar una almohada. Permite que tus manos la acaricien con suavidad, rodea su cintura con tu brazo y acaricia un lado de su rostro.
Juega con su cabello, sostén su cara entre tus manos, y luego coloca ambas manos en su cintura mientras la atraes hacia tí, recorre con la yema de tus dedos su espina dorsal, acaricia su cuello…las posibilidades son interminables. Las manos deben acariciar, recorrer, tocar, pero nunca deberían quedarse quietas en un sólo sitio o agarrar como garras.
Otro consejo: Evita ir de una vez a zonas erógenas, tocarla de forma arriesgada o inapropiada, a menos que ella lo pida directamente o lo sugiera. Hay momentos para ese tipo de caricias pero no todos los besos deben conducir al sexo, lo que nos lleva al próximo consejo.
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Besa sólo por besar
A lo que nos referimos es que los besos no siempre son preámbulo para el sexo, y ese no debería ser tu único objetivo. Los mejores besadores se distinguen porque disfrutan genuinamente la experiencia, se involucran en ella, su único objetivo es besar, hacerla sentir amada, protegida y adorada con sus labios.
Si la situación sube de tono y conduce a otros derroteros más íntimos, está bien, pero ese no debería ser el único objetivo para aprender cómo besar a una chica.
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Juguetea y seduce
Hay juegos de que un hombre besa a una mujer, y es que besar es una actividad placentera, que debería ser divertida.
Aprende a seducirla besando sin besarla: tiéntala con tus labios, roza su mejilla, acaricia su cuello, recorre con tus labios su cara, besa las comisuras de sus labios, acércate y aléjate antes de llegar a su boca, para que cuando por fin la beses te devore.
El objetivo es hacer que crezca la tensión entre ustedes y seducirla con suavidad, hacer del beso una actividad realmente divertida, sensual y jugetona.
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No te quedes sólo en los labios
Besar bien a una mujer significa tener la seguridad para moverte en otros terrenos: besa su cuello, sus mejillas, el lóbulo de la oreja, su cara.
Un beso no debería ser sólo una monótona danza ejecutada con los labios, sino que puedes diversificarla con caricias y besos en otras zonas de su anatomía. No necesitas hacerlo apasionado e intenso (aunque se puede llegar a ese punto), podrías besar de forma juguetona su frente, la punta de su nariz, se creativo.
El lugar, la forma e intensidad con que la besas puede cambiar completamente el sentido de tus labios y el objetivo de esos besos.
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Evita ser brusco
Una cosa es ser apasionado y sensual, besar con determinación y ansias, otra muy distinta es ser demasiado brusco.
Tómala con delicadeza, besa sus labios con suavidad y aumenta progresivamente el ritmo de tus besos, no vayas de una vez con todo el ímpetu de tu pasión porque puedes chocar sus dientes (y romperlos, es bastante común) o apretar tanto sus labios que puede ser doloroso.
Ten especial cuidado si tienes algo de barba, porque puedes irritar su cara. Puedes hacer un poco de fuerza, tomarla con determinación entre tus brazos y presionar un poco tus labios con los de ella, pero no tanto que la hagas perder el equulibrio y conviertas el beso en una llave de lucha libre.
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Controla tu saliva
En todas las historias de besos terribles aparece el baboso, y es que no hay nada más desagradable que terminar una sesión de besos sintiendo que necesitas una toalla para secarte la cara.
Aprender cómo dar besos implica también aprender a controlar tus glándulas salivales. Sobre todo, evita abrir la boca como si te la fueras a tragar, porque es probable que tu boca sea más grande que la de ella y si no tienes cuidado, terminarás cubriendo sus labios completamente con los tuyos lo que hace más probable que mojes toda su cara y se siente horrible.
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Cambia el ritmo
Un beso no debería ser monótono y aburrido, nada más terrible que besar a alguien que parece un robot programado para repetir un movimiento una y otra vez.
Los mejores besos son los que te llevan en una montaña rusa de emociones: pueden ser muy suaves y dulces al principio, aumentar su intensidad para volverse apasionados, robarte el aliento y volver a convertirse en una sucesión de besos dulces repartidos en tu rostro.
Un buen besador es capaz de jugar con el ritmo para mantener las cosas interesantes. Dar un buen beso implica involucrar todos tus sentidos en este juego.
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Aprende a usar los dientes
Atreverse a besar a una mujer con lengua puede ser increíblemente apasionado, pero si lo que quieres es dejarla pidiendo más y enloquecerla con tus habilidades orales y lograr que esa mujer se enamore, involucra tus dientes.
No hay nada más apasionado, caliente y delicioso que sentir un pequeño mordisqueo en el labio inferior. Para besar apasionadamente a una mujer es importante ser delicado, medir la intensidad y fuerza de los pequeños mordiscos en los labios, en el cuello y la mandíbula.
Los dientes deberían ejercer un poco de presión, pero no ser demasiado fuertes como para dejar marcas o hacer daño.
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Y por último, relájate
Un beso es importante pero no es lo único que importa. Si le gustas, aunque su primer beso sea un desastre, le seguirás gustando. Habrán más oportunidades para besar, para mejorar la técnica, para expresarle tu afecto a través de los besos.
Besar tiene que ser una actividad divertida, pasional, instintiva, no te preocupes demasiado, relájate y sé tu mismo, es la única forma de aprovechar realmente la experiencia, permite que sean tus sentimientos los que se manifiesten.
Si te preocupas en exceso por la técnica, por hacerlo perfecto, por lo que te rodea, por no equivocarte, podrías perderte la belleza de ese momento irrepetible y tener el efecto contrario. Respira profundo y déjate llevar.